El dilema de las "tres puertas" de la moneda estable y el camino hacia el futuro
En el ámbito de los activos digitales, las monedas estables son sin duda una de las innovaciones más llamativas de los últimos años. Prometen estar vinculadas a monedas fiduciarias como el dólar, construyendo un "refugio" de valor en un mundo criptográfico volátil, y se han convertido gradualmente en una infraestructura importante para las finanzas descentralizadas y los pagos globales. Su capitalización de mercado ha pasado de cero a cientos de miles de millones de dólares, lo que parece presagiar el surgimiento de una nueva forma de moneda.
Sin embargo, el Banco de Pagos Internacionales (BIS) emitió una fuerte advertencia en su informe económico de mayo de 2025. El BIS señaló que las monedas estables no son verdaderas monedas, y que detrás de su próspero ecosistema se ocultan riesgos sistémicos que podrían desestabilizar todo el sistema financiero. Esta conclusión nos obliga a reevaluar la naturaleza de las monedas estables.
Este artículo profundizará en la teoría de la "triple puerta" de la moneda propuesta en el informe del BIS, es decir, que cualquier sistema monetario confiable debe superar estas tres pruebas: singularidad, flexibilidad e integridad. Analizaremos, mediante ejemplos concretos, las dificultades que enfrentan las monedas estables ante estas tres puertas y exploraremos la dirección futura de la digitalización de la moneda.
Primera puerta: el dilema de la unicidad: ¿puede una moneda estable ser "estable" para siempre?
La "unicidad" de la moneda es la piedra angular del sistema financiero moderno. Esto significa que en cualquier momento y en cualquier lugar, el valor de una unidad de moneda debe ser exactamente igual al valor nominal de otra unidad. En pocas palabras, "un peso siempre es un peso". Esta constante y uniforme valoración es el fundamento para que la moneda cumpla sus tres funciones principales: unidad de cuenta, medio de intercambio y reserva de valor.
BIS considera que el mecanismo de anclaje de valor de las monedas estables presenta defectos intrínsecos, incapaces de garantizar fundamentalmente el canje 1:1 con la moneda fiduciaria. Su confianza no proviene del crédito estatal, sino que depende del crédito comercial del emisor privado, la calidad y transparencia de los activos de reserva, lo que lo expone en todo momento al riesgo de "desacople".
Las lecciones recientes son suficientes para ilustrar el problema. En el colapso del algoritmo de la moneda estable UST, su valor se redujo a cero en cuestión de días, borrando cientos de miles de millones de dólares en capitalización de mercado. Esto ilustra vívidamente cuán frágil es lo que se llama "estabilidad" cuando la cadena de confianza se rompe. Incluso las monedas estables respaldadas por activos han estado bajo constante escrutinio en cuanto a la composición de sus activos de reserva, auditoría y liquidez. Por lo tanto, las monedas estables ya enfrentan grandes dificultades ante la primera puerta de la "unicidad".
Segunda puerta: La tragedia de la elasticidad - La "hermosa trampa" del 100% de reservas
Si se dice que la "unicidad" se refiere a la "calidad" de la moneda, entonces la "elasticidad" se refiere a la "cantidad" de la moneda. La "elasticidad" de la moneda se refiere a la capacidad del sistema financiero de crear y reducir crédito de manera dinámica según la demanda real de la actividad económica. Este es el motor clave que permite a la economía de mercado moderna autorregularse y crecer de manera sostenible.
BIS señala que las monedas estables, especialmente aquellas que se proclaman como poseedoras del 100% de activos líquidos de alta calidad como reservas, son en realidad un modelo de "banco estrecho". Este modelo utiliza completamente los fondos de los usuarios para mantener activos de reserva seguros, sin realizar préstamos. Aunque esto suena muy seguro, tiene el costo de sacrificar completamente la "elasticidad" monetaria.
Esta característica de "inelasticidad" no solo limita el desarrollo de la moneda estable, sino que también representa un potencial impacto en el sistema financiero existente. Si una gran cantidad de fondos sale del sistema bancario comercial y se convierte en moneda estable, esto reducirá directamente los fondos disponibles para préstamos en los bancos, disminuyendo su capacidad de creación de crédito. Esto podría desencadenar un endurecimiento del crédito, elevar los costos de financiamiento y, en última instancia, perjudicar a las pequeñas y medianas empresas y a las actividades innovadoras que más necesitan apoyo financiero.
Tercera Puerta: La Falta de Integridad - La Eterna Lucha entre la Anonimidad y la Regulación
La "integridad" de la moneda es la "red de seguridad" del sistema financiero. Esto requiere que los sistemas de pago sean seguros, eficientes y capaces de prevenir eficazmente actividades ilegales como el lavado de dinero, la financiación del terrorismo y la evasión fiscal. Detrás de esto se necesita un marco legal sólido, una clara división de responsabilidades y una fuerte capacidad de supervisión y ejecución para garantizar que las actividades financieras sean legales y cumplan con la normativa.
BIS considera que la arquitectura tecnológica subyacente de las monedas estables, especialmente aquellas construidas sobre cadenas públicas, representa un desafío grave para la "integridad" financiera. Su problema central radica en la anonimidad y las características de descentralización, lo que dificulta la eficacia de los métodos de regulación financiera tradicionales.
Las características técnicas de las monedas estables desafían fundamentalmente el modelo de regulación basado en intermediarios. Esta es precisamente la razón por la que los organismos reguladores globales mantienen una alta vigilancia sobre ellas y continúan instando a que se incluyan en un marco regulatorio integral. Un sistema monetario que no puede prevenir eficazmente los delitos financieros, por mucho que su tecnología sea avanzada, tendrá dificultades para obtener la confianza definitiva de la sociedad y del gobierno.
Reflexiones adicionales: Problemas reales fuera del marco de BIS
1. Vulnerabilidades técnicas de la moneda estable
Además de los desafíos a nivel económico, las moneda estable tampoco son infalibles a nivel técnico. Su funcionamiento depende en gran medida de Internet y de la red de blockchain subyacente. Una vez que ocurra una interrupción masiva de la red, una falla en los cables submarinos, un apagón generalizado o un ataque cibernético dirigido, todo el sistema de moneda estable podría verse paralizado o incluso colapsar. Esta dependencia absoluta de la infraestructura externa es una debilidad notable en comparación con el sistema financiero tradicional.
Una amenaza a más largo plazo proviene de la disrupción de las tecnologías de vanguardia. Por ejemplo, la madurez de la computación cuántica podría representar un golpe mortal para la mayoría de los algoritmos de cifrado de clave pública existentes. Una vez que se rompa el sistema de cifrado que protege la seguridad de las claves privadas de las cuentas de blockchain, los cimientos de la seguridad de todo el mundo de los activos digitales dejarán de existir.
2. El impacto real de las monedas estables en el sistema financiero y el "techo"
El auge de las monedas estables está compitiendo directamente con los bancos tradicionales por el recurso más fundamental: los depósitos. Si esta tendencia de "desintermediación financiera" continúa expandiéndose, debilitará la posición central de los bancos comerciales en el sistema financiero, lo que a su vez afectará su capacidad para servir a la economía real.
Vale la pena profundizar en el proceso mediante el cual los emisores de moneda estable respaldan su valor comprando bonos del gobierno de EE. UU. Este proceso no es tan simple y directo como parece, ya que hay un cuello de botella clave detrás de él: las reservas del sistema bancario. Cuando los emisores de moneda estable compran a gran escala bonos del gobierno de EE. UU., eventualmente pasará a través del sistema de compensación de la Reserva Federal, lo que llevará a una disminución en el saldo de las cuentas de reservas de los bancos emisores en la Reserva Federal.
Los bancos comerciales no tienen reservas ilimitadas en la Reserva Federal. Si la escala de las monedas estables sigue expandiéndose, la compra masiva de bonos del gobierno de EE. UU. llevará a un consumo excesivo de las reservas del sistema bancario, lo que provocará presión de liquidez y presión regulatoria en los bancos. Por lo tanto, la demanda de monedas estables por los bonos del gobierno de EE. UU. tiene un límite máximo que está restringido por la abundancia de reservas en el sistema bancario y las políticas regulatorias, y no puede crecer indefinidamente.
El futuro de las monedas estables
Combinando las advertencias del BIS con la demanda del mercado, el futuro de las monedas estables parece estar en una encrucijada. Se enfrenta tanto a la presión de los reguladores globales como a la posibilidad de ser incorporado en el sistema financiero mainstream.
El futuro de la moneda estable es, en esencia, una lucha entre su "vitalidad innovadora salvaje" y los requisitos centrales de "estabilidad, seguridad y control" del sistema financiero moderno. Encontrar un equilibrio entre estas dos es un desafío común que enfrentan todos los reguladores y participantes del mercado.
Frente a este desafío, el BIS propuso un esquema de "libro mayor" "tokenizado" basado en monedas de bancos centrales, depósitos de bancos comerciales y bonos gubernamentales. Esto es esencialmente una estrategia de "cooptación", destinada a absorber las ventajas de la tecnología tokenizada, pero colocándola sobre una base de confianza liderada por el banco central.
A pesar de que el BIS ha trazado un claro plan, la evolución del mercado suele ser más compleja y diversa. El futuro de las monedas estables probablemente mostrará una tendencia de diferenciación:
Ruta de cumplimiento: algunos emisores de moneda estable adoptarán activamente la regulación, logrando la total transparencia de los activos de reserva, sometiéndose regularmente a auditorías de terceros e integrando herramientas avanzadas de AML/KYC.
Caminos de deslocalización/mercados de nicho: otra parte de las monedas estables puede optar por operar en regiones con regulaciones relativamente flexibles, continuando atendiendo a la demanda en áreas específicas como las finanzas descentralizadas y las transacciones transfronterizas de alto riesgo.
El dilema de la "triple puerta" de las monedas estables no solo revela sus propios defectos estructurales, sino que también refleja las deficiencias del actual sistema financiero global en términos de eficiencia, costos y accesibilidad. El verdadero progreso puede radicar en la fusión prudente del diseño de alto nivel "de arriba hacia abajo" y la innovación de mercado "de abajo hacia arriba", encontrando un camino intermedio entre la "persecución" y la "aprobación" hacia un futuro financiero más eficiente, más seguro y más inclusivo.
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FrontRunFighter
· hace12h
otra advertencia del bosque oscuro... los establos son solo honeypots esperando a explotar, para ser sinceros
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DAOplomacy
· hace12h
*suspiro* otro marco de trilema... ¿cuándo aprenderemos que el teatro regulatorio no resuelve problemas reales de incentivos, la verdad?
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AltcoinAnalyst
· hace12h
Los datos on-chain ya han expuesto estos riesgos, realmente estoy preocupado.
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BridgeNomad
· hace12h
he visto demasiados stables implosionar... los vectores de confianza son más frágiles de lo que piensas, para ser honesto
El triple dilema de la moneda estable: desafíos de singularidad, elasticidad e integridad
El dilema de las "tres puertas" de la moneda estable y el camino hacia el futuro
En el ámbito de los activos digitales, las monedas estables son sin duda una de las innovaciones más llamativas de los últimos años. Prometen estar vinculadas a monedas fiduciarias como el dólar, construyendo un "refugio" de valor en un mundo criptográfico volátil, y se han convertido gradualmente en una infraestructura importante para las finanzas descentralizadas y los pagos globales. Su capitalización de mercado ha pasado de cero a cientos de miles de millones de dólares, lo que parece presagiar el surgimiento de una nueva forma de moneda.
Sin embargo, el Banco de Pagos Internacionales (BIS) emitió una fuerte advertencia en su informe económico de mayo de 2025. El BIS señaló que las monedas estables no son verdaderas monedas, y que detrás de su próspero ecosistema se ocultan riesgos sistémicos que podrían desestabilizar todo el sistema financiero. Esta conclusión nos obliga a reevaluar la naturaleza de las monedas estables.
Este artículo profundizará en la teoría de la "triple puerta" de la moneda propuesta en el informe del BIS, es decir, que cualquier sistema monetario confiable debe superar estas tres pruebas: singularidad, flexibilidad e integridad. Analizaremos, mediante ejemplos concretos, las dificultades que enfrentan las monedas estables ante estas tres puertas y exploraremos la dirección futura de la digitalización de la moneda.
Primera puerta: el dilema de la unicidad: ¿puede una moneda estable ser "estable" para siempre?
La "unicidad" de la moneda es la piedra angular del sistema financiero moderno. Esto significa que en cualquier momento y en cualquier lugar, el valor de una unidad de moneda debe ser exactamente igual al valor nominal de otra unidad. En pocas palabras, "un peso siempre es un peso". Esta constante y uniforme valoración es el fundamento para que la moneda cumpla sus tres funciones principales: unidad de cuenta, medio de intercambio y reserva de valor.
BIS considera que el mecanismo de anclaje de valor de las monedas estables presenta defectos intrínsecos, incapaces de garantizar fundamentalmente el canje 1:1 con la moneda fiduciaria. Su confianza no proviene del crédito estatal, sino que depende del crédito comercial del emisor privado, la calidad y transparencia de los activos de reserva, lo que lo expone en todo momento al riesgo de "desacople".
Las lecciones recientes son suficientes para ilustrar el problema. En el colapso del algoritmo de la moneda estable UST, su valor se redujo a cero en cuestión de días, borrando cientos de miles de millones de dólares en capitalización de mercado. Esto ilustra vívidamente cuán frágil es lo que se llama "estabilidad" cuando la cadena de confianza se rompe. Incluso las monedas estables respaldadas por activos han estado bajo constante escrutinio en cuanto a la composición de sus activos de reserva, auditoría y liquidez. Por lo tanto, las monedas estables ya enfrentan grandes dificultades ante la primera puerta de la "unicidad".
Segunda puerta: La tragedia de la elasticidad - La "hermosa trampa" del 100% de reservas
Si se dice que la "unicidad" se refiere a la "calidad" de la moneda, entonces la "elasticidad" se refiere a la "cantidad" de la moneda. La "elasticidad" de la moneda se refiere a la capacidad del sistema financiero de crear y reducir crédito de manera dinámica según la demanda real de la actividad económica. Este es el motor clave que permite a la economía de mercado moderna autorregularse y crecer de manera sostenible.
BIS señala que las monedas estables, especialmente aquellas que se proclaman como poseedoras del 100% de activos líquidos de alta calidad como reservas, son en realidad un modelo de "banco estrecho". Este modelo utiliza completamente los fondos de los usuarios para mantener activos de reserva seguros, sin realizar préstamos. Aunque esto suena muy seguro, tiene el costo de sacrificar completamente la "elasticidad" monetaria.
Esta característica de "inelasticidad" no solo limita el desarrollo de la moneda estable, sino que también representa un potencial impacto en el sistema financiero existente. Si una gran cantidad de fondos sale del sistema bancario comercial y se convierte en moneda estable, esto reducirá directamente los fondos disponibles para préstamos en los bancos, disminuyendo su capacidad de creación de crédito. Esto podría desencadenar un endurecimiento del crédito, elevar los costos de financiamiento y, en última instancia, perjudicar a las pequeñas y medianas empresas y a las actividades innovadoras que más necesitan apoyo financiero.
Tercera Puerta: La Falta de Integridad - La Eterna Lucha entre la Anonimidad y la Regulación
La "integridad" de la moneda es la "red de seguridad" del sistema financiero. Esto requiere que los sistemas de pago sean seguros, eficientes y capaces de prevenir eficazmente actividades ilegales como el lavado de dinero, la financiación del terrorismo y la evasión fiscal. Detrás de esto se necesita un marco legal sólido, una clara división de responsabilidades y una fuerte capacidad de supervisión y ejecución para garantizar que las actividades financieras sean legales y cumplan con la normativa.
BIS considera que la arquitectura tecnológica subyacente de las monedas estables, especialmente aquellas construidas sobre cadenas públicas, representa un desafío grave para la "integridad" financiera. Su problema central radica en la anonimidad y las características de descentralización, lo que dificulta la eficacia de los métodos de regulación financiera tradicionales.
Las características técnicas de las monedas estables desafían fundamentalmente el modelo de regulación basado en intermediarios. Esta es precisamente la razón por la que los organismos reguladores globales mantienen una alta vigilancia sobre ellas y continúan instando a que se incluyan en un marco regulatorio integral. Un sistema monetario que no puede prevenir eficazmente los delitos financieros, por mucho que su tecnología sea avanzada, tendrá dificultades para obtener la confianza definitiva de la sociedad y del gobierno.
Reflexiones adicionales: Problemas reales fuera del marco de BIS
1. Vulnerabilidades técnicas de la moneda estable
Además de los desafíos a nivel económico, las moneda estable tampoco son infalibles a nivel técnico. Su funcionamiento depende en gran medida de Internet y de la red de blockchain subyacente. Una vez que ocurra una interrupción masiva de la red, una falla en los cables submarinos, un apagón generalizado o un ataque cibernético dirigido, todo el sistema de moneda estable podría verse paralizado o incluso colapsar. Esta dependencia absoluta de la infraestructura externa es una debilidad notable en comparación con el sistema financiero tradicional.
Una amenaza a más largo plazo proviene de la disrupción de las tecnologías de vanguardia. Por ejemplo, la madurez de la computación cuántica podría representar un golpe mortal para la mayoría de los algoritmos de cifrado de clave pública existentes. Una vez que se rompa el sistema de cifrado que protege la seguridad de las claves privadas de las cuentas de blockchain, los cimientos de la seguridad de todo el mundo de los activos digitales dejarán de existir.
2. El impacto real de las monedas estables en el sistema financiero y el "techo"
El auge de las monedas estables está compitiendo directamente con los bancos tradicionales por el recurso más fundamental: los depósitos. Si esta tendencia de "desintermediación financiera" continúa expandiéndose, debilitará la posición central de los bancos comerciales en el sistema financiero, lo que a su vez afectará su capacidad para servir a la economía real.
Vale la pena profundizar en el proceso mediante el cual los emisores de moneda estable respaldan su valor comprando bonos del gobierno de EE. UU. Este proceso no es tan simple y directo como parece, ya que hay un cuello de botella clave detrás de él: las reservas del sistema bancario. Cuando los emisores de moneda estable compran a gran escala bonos del gobierno de EE. UU., eventualmente pasará a través del sistema de compensación de la Reserva Federal, lo que llevará a una disminución en el saldo de las cuentas de reservas de los bancos emisores en la Reserva Federal.
Los bancos comerciales no tienen reservas ilimitadas en la Reserva Federal. Si la escala de las monedas estables sigue expandiéndose, la compra masiva de bonos del gobierno de EE. UU. llevará a un consumo excesivo de las reservas del sistema bancario, lo que provocará presión de liquidez y presión regulatoria en los bancos. Por lo tanto, la demanda de monedas estables por los bonos del gobierno de EE. UU. tiene un límite máximo que está restringido por la abundancia de reservas en el sistema bancario y las políticas regulatorias, y no puede crecer indefinidamente.
El futuro de las monedas estables
Combinando las advertencias del BIS con la demanda del mercado, el futuro de las monedas estables parece estar en una encrucijada. Se enfrenta tanto a la presión de los reguladores globales como a la posibilidad de ser incorporado en el sistema financiero mainstream.
El futuro de la moneda estable es, en esencia, una lucha entre su "vitalidad innovadora salvaje" y los requisitos centrales de "estabilidad, seguridad y control" del sistema financiero moderno. Encontrar un equilibrio entre estas dos es un desafío común que enfrentan todos los reguladores y participantes del mercado.
Frente a este desafío, el BIS propuso un esquema de "libro mayor" "tokenizado" basado en monedas de bancos centrales, depósitos de bancos comerciales y bonos gubernamentales. Esto es esencialmente una estrategia de "cooptación", destinada a absorber las ventajas de la tecnología tokenizada, pero colocándola sobre una base de confianza liderada por el banco central.
A pesar de que el BIS ha trazado un claro plan, la evolución del mercado suele ser más compleja y diversa. El futuro de las monedas estables probablemente mostrará una tendencia de diferenciación:
El dilema de la "triple puerta" de las monedas estables no solo revela sus propios defectos estructurales, sino que también refleja las deficiencias del actual sistema financiero global en términos de eficiencia, costos y accesibilidad. El verdadero progreso puede radicar en la fusión prudente del diseño de alto nivel "de arriba hacia abajo" y la innovación de mercado "de abajo hacia arriba", encontrando un camino intermedio entre la "persecución" y la "aprobación" hacia un futuro financiero más eficiente, más seguro y más inclusivo.